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Jul 23, 2023

La sal es todo lo que necesitas para una cena sencilla de pollo crujiente

Muchas veces nos encontramos sin todos los ingredientes y condimentos que nos gustaría tener. Estos casos rara vez son tan desesperados como parecen. Mientras tengas sal en tu despensa, podrás preparar la cena. Puede que no parezca mucho, pero la sal es realmente todo lo que necesitas para hacer un pollo maravillosamente crujiente.

El proceso comienza al menos 3 horas antes de cocinar. Tome un pollo entero, de aproximadamente 4 libras, y deshueselo y marquelo para que el ave quede en una capa uniforme en la fuente para asar. El mariposado del pollo implica la eliminación de toda la columna vertebral y la pechuga del pollo, mientras que el deshuesado elimina los huesos restantes de las piernas y los muslos. No te molestes con las alas. Si está preocupado por este proceso, no lo esté. Es fácil dominarlo con un poco de práctica, pero siempre puedes pedirle a un buen carnicero que lo haga por ti.

Con una buena cucharadita de sal kosher, frote todo el pollo y déjelo reposar en el refrigerador de 1 a 3 horas. Durante este tiempo, la sal inyectará sabor a la carne mientras extrae la humedad de la piel, lo que hará que quede crujiente en el horno mucho más rápido. Aproximadamente 10 minutos antes de cocinarlo, retire el pollo del refrigerador para que tenga tiempo de alcanzar la temperatura ambiente antes de cocinarlo. Esto, junto con el deshuesado y el mariposado, ayudará a cocinar el ave asada de forma rápida y uniforme.

Cocine el pollo debajo del asador durante 10 minutos. La sartén debe estar a una distancia de 3 a 6 pulgadas del elemento calefactor y girarse aproximadamente a la mitad para que se dore uniformemente. Luego se puede bajar el horno a 250 grados Fahrenheit, donde el pollo se cocinará durante 25 minutos más. Si esto te parece poco tiempo a fuego lento, recuerda que le has dado nueva forma al pollo para que quede plano. Esto lo expone a más calor, lo que le permite cocinarse más rápido que un ave entera.

Aunque el pollo terminado quedará sabroso, tierno y crujiente, puedes acompañarlo con algunas cosas para darle un toque extra. Dado que estamos trabajando con ingredientes mínimos, una vinagreta o adobo ya preparado funcionará bien para rociar sobre el pollo y darle un sabor elevado. Los acompañamientos clásicos como el puré de papas cremoso o los crujientes asados ​​funcionarán bien. Alternativamente, las coles de Bruselas asadas, las zanahorias hervidas o incluso una ensalada verde son excelentes para acompañar este pollo asado.

Si no está dispuesto a probar el pollo de esta manera, ya sea por la posibilidad de deshuesarlo o por el hecho de que el único condimento es la sal, le recomendamos que no lo descarte antes de haberlo probado. Una cucharadita de sal es muy útil para un pollo cuando ha tenido tiempo de reposar y trabajar en la piel y la carne. Y, a pesar de la larga espera en el refrigerador, sería difícil encontrar un ave que se cocine más rápido.

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